jueves, 15 de octubre de 2009

Día Naranja 2: Coqueta, pero con poco jugo

No sé si por fin mañana es el día de estreno, pero en vista de que estaré fuera de la ciudad durante el fin de semana, me adelanto a los hechos y publico mi último post sobre la ópera prima de Alejandra Szeplaky. La cinta debía estrenarse la semana pasada, pero el hecho de que tanto Zamora como Venezzia continuaran en cartelera, sumado al estreno de los Malditos Bastardos de Tarantino, hizo que los dueños de las salas arrugaran y postergaran la llegada del Día Naranja otra semana más. Vamos a ver cómo le va ahora a este "Babel sureño" contra los aliens de Distrito 9.

“La comparación con Babel tiene algo de sentido porque está filmada en 3 ciudades diferentes y los personajes no se conocen a pesar de tener un nexo en común, pero para mí, si Día Naranja tiene comparación con una película es con Amelie, porque la película tiene una carga estética impresionante. Es un regalo para el espectador. Tiene un juego cromático bellísimo que conseguimos con mucha post producción digital, mucha fantasía, mucho de ilusión y una técnica bien compleja que fue filmar en 35mm, post producir digitalmente, insertar efectos especiales y luego pasar a 35 mm otra vez.” Comenta la directora. Y es que para Alejandra Szeplaki la estética tiene un valor fundamental. Se nota en la decoración de su oficina, en su forma de vestir y en cada fotograma de Día Naranja, primero muerta que mal arreglada. Darle ese look especial a la cinta tenía un costo y este fue cubierto en su mayoría por el CENAC, Bolívar Films, Tango Bravo, Cinema Sur y Cines Unidos.

“Quisimos hacer rendir el dinero para que la película luzca mucho mejor de lo que realmente costó, queríamos un producto de muy buena factura, que a pesar de los recortes presupuestarios la estética no se viera afectada. Si después de tanto trabajo la cosa se hubiera visto fea, hubiera sido una tragedia.”

La dirección de arte estuvo a cargo de Vera Español (muy cotizada en el mercado de los comerciales argentinos) y Matías Tica (Venezolano). La fotografía es obra de Cezary Jaworsky. Juntos lograron darle a Día Naranja un estilo visual muy poco visto en el cine venezolano, o sea, muy bien cuidado y coherente con su propuesta estética. Siento que ninguna otra película venezolana estrenada este año (O en años anteriores) se ve tan bien como Día Naranaja.
“Quería que hubiera muchos artistas en la película. No estoy hablando de actores precisamente, sino de directores de arte, pintores, diseñadores de vestuario, fotografía, artes plásticas, si la película no le va bien en taquilla, queremos que al menos sea un suceso en materia cultural. Hay una gran conjunción de talentos, quería que las mujeres tuvieran una participación realmente especial en su creación, para que cada uno en su respectivo talento se luciera.” Agrega Alejandra.
“Igualmente, los hombres del crew tuvieron que buscar su lado femenino para conectar con la belleza estética que buscábamos. Fue muy divertido. Al final, creo que logramos conjugar mucho talento de América Latina, no sólo de Venezuela.”

Naranja con Poco Jugo


Día Naranja es un triunfo a nivel visual. Alejandra Szeplaki hace un muy buen trabajo en dotar a su película de una estética consistente, con una fotografía más que competente donde se nota el cuidado en los encuadres y un especial detalle en el uso del color, tanto en la escenografía como en los vestuarios. Desde los créditos iniciales y prácticamente hasta los créditos finales, comienza un despliegue de recursos gráficos que hacen que la película parezca una bolsa de chucherías. Eye candy puro.
Sin embargo, para mí es allí donde también radican sus debilidades. Día Naranja, prioriza el empaque por encima del contenido. La historia es más que sencilla y a mi parecer, nunca termina de despegar o de conectar con el espectador. ¿Será porque soy hombre y la película es más para mujeres? No lo creo. Honestamente, el guión resulta bastante pobre, con escenas previsibles y un montón de secuencias que aunque se ven muy bien en pantalla, no aportan absolutamente nada al cuento de estas 3 chicas.



Las escenas que ocurren de manera simultanea entre los 3 países están muy bien logradas, tanto, que remiten a Las Horas de Stephen Daldry en ciertos momentos, sin embargo estas secuencias son escasas y pareciera que para estirar metraje, se colocaron incontables tomas de las chicas caminando por la ciudad o animaciones sin sentido aparente.
Las actuaciones están bastante equilibradas. Se aplaude el trabajo del ensamble en general, aunque lamentablemente, siento que a Carolina Riveros le falta. La actriz me parece bella y fresca, pero no sé qué pasa con ella o con el personaje, que hizo que me retorciera cada vez que abría la boca para decir una tontería. Alejandra dice que este personaje representa a una de las tantas menores que hacen de Venezuela uno de los países con mayor porcentaje de embarazos prematuros del continente. Yo no puedo estar más en desacuerdo pues este personaje que fantasea con ser Sailor Moon y camina por Caracas con alas de hada parece tener un pepito picho en la cabeza. No la siento representativa de nada.

En resumen, La Naranja, por muy linda que parece por fuera, le falta algo de jugo. Algunos piensan que la que toma la decisión de qué película ver a la hora de ir al cine es la mujer y no el hombre. Esto puede favorecer a Día Naranja, pues sus temas apelan principalmente al público femenino, sin embargo, su directora insiste en que los hombres podrán disfrutarla por igual. “Todo el que esté en pareja y quiera ir al cine a pasarla bien, que quiera ver una historia de amor bonita, que quiera ir a divertirse, pasar un rato agradable y fresco, va a disfrutar de Día Naranja. Es una película de celebración, de belleza, para compartir con amigos y gente querida.”

2 comentarios:

Mr. Mxyztplk (pronunciado mix-yez-pit-el-ick) dijo...

Las posibilidades técnicas hacen que hoy en día cualquiera pueda hacer un corto o una peli con una propuesta visual bonita. Pero francamente eso me parece afecta gravemente al cine venezolano (también al mundial ojo)
La gente parece estar tan enfrascada en lograr la estética de comercial de perfume, que olvidan que sin una historia no tienen nada.
Creo que la cinta fue un fracaso horrible de taquilla a pesar de que la publicitaron bastante. Me pregunto porqué habrá sido.

Caque dijo...

Totalmente de acuerdo Mxyztplk, Hoy si cuentas con los fonods y los creativos, se puede hacer mucho. Y a pesar de lo mala que fue Día Naranja, hay que reconocer que al menos en el apartado visual, se ha hecho un esfuerzo que tenía tiempo (por decir lo menos) sin mostrarse en el cine venezolano. El día que logremos equilibrar todo ese aspecto visual, esas propuestas estéticas intensísimas con una buena historia, tal vez logremos una película destacable.