viernes, 21 de mayo de 2010

subHysteria: Polariza y... ¿Vencerás?

Suele ser la norma echarle un camión de bolas a la promoción de una película durante la semana de estreno. Entrevistas para cuanto medio exista, pancartas, material P.O.P, etc... Montarse en ese tren suele resultar tan agotador para los cineastas como el proceso de rodaje del film y de paso, no termina con la premiere, por el contrario, se intensifica. Hay que multiplicar el boca a boca cuando es positivo y luchar contra la crítica negativa en caso de que la haya.
En este sentido, la experiencia de subHysteria me parece intersantísima pues se han dedicado a replantear su estrategia de venta sacándole provecho a las contradictorias opiniones de los espectadores. La película desata amor y odio visceral en el público y yo mismo me cuento entre los polarizados. Dudo que haya habido una función en la que alguién no haya abandonado la sala a la media hora, así como dudo que no haya habido función donde un espectador absorto no haya sobre intelectualizado los resultados creyendo encontrarse con una obra maestra de inmensa poesía y recovecos semióticos.

Si bien en un principio, el gran tema de la promoción intentaba amalgamar la inusual realización de la cinta (Cine Guerrilla, Cine Improv) con la historia de 16 desconocidos atrapados en un vagón de metro, siempre quedó la duda en los foros de qué tanto le interesaría la historia detrás de cámara al espectador común que sólo va a la sala a pasar el ra

Pronto, el esquema de promoción cambió e inundó las redes sociales con frases como estas:

"Unos la odian, otros la aman... pero la decision final la tienes TU!"

"Están super polarizados, tanto la critica como la audiencia... formate tu propia opinion. "

"Sigue la polarizacion. La critica esta 5-5 y los tweets: la aman 73 y la odian 71. y TU?, la amaras u odiaras?"
Si a esto sumamos la iniciativa de Cines Unidos y Los Otros Group de colocar antes de la película el cortometraje venezolano Jesús TV, que ha duplicado los esfuerzos de promoción, considero que todo ha terminado dando un giro genial.
Para mi, sigue siendo la tenaz experiencia detrás de cámaras y sus esfuerzos de promoción, los que hacen de subHysteria una película interesante, arriesgada y digna de ser recordada.

Ya hablando como espectador, desligado del proceso de producción, siento que la película tiene virtudes y fallas por igual. La razón por la que no me gustan los espectáculos de Improvisto, es porque siento que sólo los actores involucrados se divierten. Lo mismo me pasó con subHysteria. Somos testigos de un experimento, de un ejercicio actoral arrechísimo y de un reto bestial para el director y los editores que debieron dar sentido a 36 horas de improvisaciones.

¿Pero qué hay de los resultados?
Sobran elementos, escenas sin propósito, personajes que prometen pero que no llegan a nada y rematamos con una fotografía oscura y caótica que en mi caso, tendió a aburrirme. Celebramos, sí señor, ciertas actuaciones (Exceptuando a Rebeca Alemán y Elaiza Gil) y parlamentos punzantes, que de nuevo, para ser improvisados, no dejan de sorprender por su tino.

Subhysteria tiene más cojones que el resto de las películas venezolanas que se han estrenado este año juntas. Es una cinta arriesgada, con una energía e ímpetu, de la que creo, muchos deberíamos aprender.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Prakriti Maduro, una chica Fina

Si hay un vínculo que Habana Eva tiene con el resto de la filmografía de Fina Torres, dicho por ella, es que su protagonista es una fémina en proceso de transformación. En ese combo están juntas Doris Wells, Claudia Venturini, Ariadna Hill, Penélope Cruz y ahora, Prakriti Maduro.

“Prakriti tenía el físico del personaje." - Comenta la directora- "Su belleza original y moderna, de apariencia dulce, inocente, frágil y al mismo tiempo sensual, fuerte y decidida. O sea, ideal para la transformación de niña tímida a mujer audaz, tema central de la historia. Era su primer rol protagónico en una película y se entregó con alma, vida y gran profesionalismo. Cumplió el reto a cabalidad.”
Prakriti Maduro tiene más de 10 años siendo miembro del Grupo Teatral Skena, ha realizado varios cursos de actuación en el exterior y su rostro es conocido en Venezuela, por sus más de 30 comerciales y apariciones en telenovelas como Voltea pa´ que Te Enamores y actualmente, Harina de Otro Costal. Para ella, trabajar con Fina, era una oportunidad que no podía volver a dejar pasar.

“Cuando tenía 5 años, dieron Oriana en lo que era Venezolana de Televisión, y mi mamá me contó muy orgullosa que esa película se había Ganado el Cannes y la directora Fina Torres, era venezolana. Yo aluciné con el hecho de que una Mujer – Venezolana – se había Ganado eso. Un par de años después, una tía llamó a mi mamá porque buscaban a un niño rubio como mi hermano, para un casting de una película de Fina. Yo quería hacer ese casting, “no Prakriti, es para un varón”, “pero a lo mejor también les sirve una niña” “no Prakriti, quieren que sea rubio” “Bueno pero yo me pinto el pelo” Pasaron casi 20 años para que se me volviera a presentar la oportunidad, y esta vez sí buscaban a una “niña”, así que no me arriesgué a desperdiciarla.”

¿Como te involucraste con Havana Eva?

- “Para mí fue un gran honor, muchísimas actrices jóvenes venezolanas hicieron prueba para ese personaje, y se hicieron dos grandes casting en toda Cuba buscando a la actriz que interpretara a Eva, así que el ser escogida para interpretar a una cubana siendo yo una venezolana, fue un gran regalo que debía cuidar como a un bebé. Me involucré emocional, intelectual y creativamente. Fina, respetó mi criterio desde el principio y me hizo partícipe en decisiones de mi personaje que como actriz no me correspondían. Cosa que me encantó. Y luego me invitó a estar involucrada en el proceso del montaje, post-producción, logística, promoción. Así que no es una película que filmé y actué dos meses y ahora espero su estreno, no, es mi ahijada, que la he visto crecer, y en mayo la presentaremos en sociedad. Jejeje."

¿Te pareces a Eva?
- "Me parezco mucho y la entiendo, en la necesidad de expresarse artísticamente, en no querer conformarse con lo que parece correcto para su vida, en tratar de escucharse a sí misma para ser más auténtica y no estancarse en las oportunidades que llegan sino en buscar las que uno quiere. Incluso coincido con Eva en la experiencia de vida de haber estado enamorada de dos hombres a la vez. Tiempo antes de filmar había experimentado una situación muy parecida, esa convicción de no saber escoger entre dos amores, y ante la presión social y necesidad de estabilidad que te obliga a decidir. Y al igual que a Eva esa experiencia me enseñó a reforzar mi independencia. Por lo que con todo el desprendimiento y generosidad le regalé a Eva toda mi verdad.


¿Te toco poner acento de Juana la Cubana?

- Sí, para mí fue más que un reto, pues era un acento que ni jugando me atrevía a imitar. Pero al enterarme de que el personaje era cubana, para una película de Fina Torres, pues, no podía perder la oportunidad, así que llamé a una buena amiga cubana y también actriz, Beatriz Valdés, para que me ayudara a preparar mi casting, y me dio tips muy importantes para tener acento en cada frase de esas escenas. Y así lo hice. Eso convenció a los productores cubanos de que podría aprender el acento. Pero cuando aterricé en La Habana me tocó enfrentarme con la realidad: todo un guión con el que debía reaprender a hablar, y solo una semana antes de arrancar a rodar. Por supuesto, pelando la oreja en todas las esquinas, repitiendo todas las frases, recibiendo tips del taxista, de la mucama, del productor y de los actores cubanos. Al año de filmar hicimos algunos doblajes de muchos de los textos, y me quedé sorprendida como el acento fue calando en mí. Al año, era mucho más fluido, creíble, honesto y natural, por lo que agradecí la oportunidad de hacer doblaje en postproducción. Todavía se me salen unas que otras expresiones cubanas. Así sería la lucha por hablar como cubana a como diera lugar.


¿Que tal la experiencia d rodar en Cuba?
- "Maravillosa, fueron días muy intensos para mí porque estaba en una ciudad muy exótica, llena de historia, y vacía de muchas otras cosas. Rodeada de gente con todo una cultura muy diferente a la de cualquier extranjero, que es lo que yo era. Llegué a conocer un país y con la responsabilidad inmediata de representarlo. Cada esquina me despertaba la curiosidad, cada costumbre, cada rutina, cada estilo de vida, cada opinión que escuchaba me intrigaba y me hacía querer saber más. Porque es un país en condiciones únicas, y porque muchas de esas condiciones se han pretendido instaurar en Venezuela, por lo que Cuba es un futurible de mi país."

"Yo creo que los cubanos (que viven en Cuba) más felices son los artistas, porque nadie va a hacerse rico con su trabajo, no importa el oficio o la profesión, y los artistas tampoco, pero trabajan sólo por el placer de expresarse y la recompensa es el arte. En Cuba son innumerables las limitaciones para la producción por todo lo que escasea, pero sobra la preparación profesional. Así que lo que falta por un lado lo completan por el otro, y para muestra, la excelencia en el cine cubano."

La película viene cambiando de fecha de estreno desde hace un tiempo, probablemente ocurra un par de semanas después de SubHysteria. Pronto, una conversación con su directora Fina Torres.