lunes, 1 de marzo de 2010

Oscar 2010, El Ídolo Roto

Los cinéfilos lo aman y odian por igual. Para unos, es el pináculo del éxito cinematográfico. Para otros, una versión del Premio Ronda hecha con mucho dinero, o sea, un desdeñable show televisivo que responde más a intereses comerciales que a méritos artísticos. Y es que a pesar de que no le llega ni por las sandalias al Che Che de Oro, honestamente el Oscar es el último placer culposo del cinéfilo. Para bien o mal, una referencia a la hora de elegir qué ver entre los millones de títulos que se estrenan cada año.

Poner en tela de juicio su prestigio no es una discusión nueva, y como errar es de humanos, de seguro se seguirá haciendo en años venideros. El Oscar ha premiado y seguirá premiando a las producciones taquilleras por encima de las mejores; a los actores de moda o a punto de morir, por encima de quienes se dejan la piel en sus personajes; premiará a una que otra minoría marginada históricamente y a algún otro artista sacado con pinzas del olvido con argumentos tan flojos como: “Ha sido nominado 70 veces y nunca ha ganado”. Es contigo, Scorsesse.
El 2010 promete tener todos estos malos hábitos y probablemente invente algunos nuevos, revisemos los casos principales y repasemos algo de historia:

Oscar a la Mejor (Más taquillera) película del año:
Avatar ya ganó el premio Globo de Oro como mejor película y hundió al Titanic como la cinta más taquillera de la historia. El toque dorado de James Cameron, no se pone en duda. La cinta fue más que entretenida, sí, ¿Pero la mejor del año? Sólo si nunca viste Pocahontas o Danza con lobos.

No sería la primera vez que pasa algo así. En el 2006 la cinta de Martin Scorsesse, The Departed, estuvo entre las 10 películas más taquilleras del año gracias a su elenco de superestrellas y le arrebató el Oscar a obras (a mi parecer) de mayor mérito como Babel, muy a pesar de ser un remake del filme coreano Infernal Affairs. Casos similares ocurrieron con Gladiador y el mismísimo Titanic.

Oscar a la Minoría Marginada Históricamente:
Katherine Bigelow puede convertirse este año en la primera mujer en la historia del premio en ganar un Oscar como directora por The Hurt Locker. Para mi, este premio debió ganarlo Jane Campion en el 92 por The Piano, pero como la academia la caga y después la pisa, este año se sacudiran ese muerto premiando a la ex esposa de James Cameron, cosa que aporta un tinte tele novelesco a la contienda y puede atraer a más espectadores del show.

Algo similar ocurrió en el 2001, cuando Halle Berry se convirtió en la primera negrita en ganar un Oscar, justo el mismo año en que el premio al mejor actor fue a dar a manos de su colega negro, Denzel Washington. ¿Coincidencia? Ni de broma. Ni hablar del famoso “año gay” de la academia, donde Transamerica, Capote y Brokeback Mountain encabezaron las nominaciones y galardones de la noche.

El Oscar de la Muerte:
Bautizado así por la actriz Marlene Dietrich (Quien se fue lisa, pues nunca fue premiada), al decir que "te lo dan cuando tienes un pie en la Tumba". El año pasado se lo llevo el genial compositor Ennio Morricone, este año, se lo darán al fructífero cineasta de películas “Balurdas”, Roger Corman, quien tiene una de las filmografías más extensas hechas por cineasta alguno al haber producido 388 películas y haber dirigido 56.

Con este premio también “mataron” a otros grandes, como Andrej Wajda, Ray Harryhausen, Kirk Douglas, Michelangelo Antonioni, Chaplin, Kurosawa, Hitchcock, Orson Welles y Fellini.

Oscar al Mejor Artista Olvidado:
Después de 4 nominaciones previas, este finalmente puede ser el año del siempre excelente Jeff Bridges por su filme, Crazy Heart. Aún no he visto la película como para opinar sobre si se lo merece o no, pero poco importa. En todo caso, la Academia estaría premiando su Starman, su Dude Lebowski o cualquier otro de sus tripeantes personajes. Well donde Duderino!

Las mismas condiciones aplicaron para Al Pacino, quien había sido nominado en 8 ocasiones previas antes de ganar y más recientemente, con Martin Scorsesse, quien fue premiado por una de las películas más flojas de su filmografía después de haberse ido con las manos vacías en 8 ceremonias. Esta última tendencia, se siente como una manera reciente de expiar los incontables pecados que la academia ha cometido con algunas de las obras y autores más importantes de la historia del cine. Pero no se puede tapar el sol con un dedo. Fritz Lang, Kieslowsky, Tarkovsky, Kubrick, Truffaut, Buñuel, Chalbaud...(Perdón por ese último chiste malo)
En conclusión, ver la entrega del Oscar y no salir botando espuma por la boca es casi tan difícil como hacer los trámites de CADIVI sin pasar una rabieta. Mi consejo: No tomarse la entrega muy en serio. Las buenas películas y los verdaderos artistas no necesitan de un Oscar para demostrar que lo son. Pero que bien se siente verlos ganar cuando en contadas excepciones, premian a quien realmente lo merece.

4 comentarios:

Elena dijo...

jeje me gustó este post. Este año no haré la quiniela pues no he visto ninguna peli, espero que Avatar no vaya a ganar algo como el mejor guión pues ahí apagaré la tv.

Caque dijo...

Gracias por tu comentario Helena! Tranquila, que al menos en guión no gana "Danza con Navis". (No está nominada)

El Buruso dijo...

La academia quiere que te enfurezcas. La academia necesita que no estés de acuerdo. De lo contrario, no tendría propósito alguno La academia es una de las formas más sublimes de lotería. Borges imaginó la biblioteca de Babel. Los Oscares la perfeccionaron para que, coincida o no tu opinión con la de una multitud de críticos casi anónimos y cuasi-selectos, siempre sientas el mismo furor.

charlesstone25 dijo...

Ganará Inglourious Basterds